Mientras una máquina funciona, el hombre pone en ella la poesía que le falta

Mientras una máquina funciona, el hombre pone en ella la poesía que le falta, hasta siente correr sangre y amistad entre los dos. Después de que falla, es un complicado y retorcido engranaje de hierros fríos y hojalata que da miedo.

Carmen Laforet: La mujer nueva.


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